Mi ignorante e ignorado
señor Trueba:
Permítame en primer lugar
felicitarle por su último minuto de gloria. Y si digo último es porque de todo
corazón deseo que sea el último, aunque no las tengo todas conmigo. En realidad,
un mediocre en el país de los mediocres tiene mucho más futuro que alguien con
talento. Sí, señor Trueba, ese país del que usted dice no sentirse ciudadano;
ese país que admira a los ignorantes que le desprecian y luego se suma al carro
del auto insulto. Del insulto a sí mismo, que es lo más ridículo y absurdo que
puede existir. Porque usted, diciendo esas sandeces, ha demostrado no solo ser
español, sino ser el más español entre los españoles, señor Trueba. Pero esto no
lo digo yo, que ya lo decía don Joaquín María Bartrina y de Aixemús (Reus, 1850 - Barcelona, 1880) Le diría que realista catalán, pero es igual porque usted
no sabría de lo que le hablo:
Oyendo hablar a un hombre fácil es
acertar donde vio la luz del sol:
si habla bien de Inglaterra será inglés,
si habla mal del alemán es un francés,
y si habla mal de España es español.
acertar donde vio la luz del sol:
si habla bien de Inglaterra será inglés,
si habla mal del alemán es un francés,
y si habla mal de España es español.
Porque
aunque los iletrados como usted, dedíquense al cine, al circo o a la política, crean lo contrario, los catalanes siempre se han sentido españoles. Porque los
iletrados como usted no tienen ni idea de que el nacionalismo, ya sea el
catalán, el vasco, el italiano o el alemán no tiene nada que ver con la
izquierda sino que es de extrema derecha. Porque los iletrados como usted,
piensan que ser republicano es ser de izquierdas y ser monárquico es ser de
derechas. Si les oyeran Ronald Reagan o Sarkozy; o Tony Blair o James Callaghan…
las dos eles se pronuncian como una sola y la h es muda. Porque además los
ignorantes como usted, repiten sin planteárselo que el cine es un arte. Y no seré
yo quien le niegue su calidad de obra de arte a algunas -muy contadas-
películas, con la venia de Luchino Visconti. Pero lo que usted y otros como
usted hacen, con nuestro dinero por cierto, no es otra cosa que juntar escenas
grabadas una y mil veces, para que el actor no tenga que interpretar. Con
guiones dictados por la productora para que el guionista no tenga que pensar. Y
cobrar una subvención que ni se han ganado, ni han amortizado, ni van a sacar
nunca en taquilla. O sea, la casa de Tócamerroque,
el puerto de Arrebatacapas, el
patio de Monipodio y el sueño de Rinconete y Cortadillo o de Lázaro de Tormes ¿Y
dice usted de verdad que no se siente español?
Por
cierto, que mientras sus admirados franceses bombardeaban Cádiz en 1812, en el
Oratorio de San Felipe Neri se reunían las primeras Cortes Españolas. Allí
proclamarían la primera Constitución democrática, frente a la carta otorgada
por Napoleón llamada Estatuto de Bayona. Pero es igual, seguro que tampoco sabe de lo
que hablo. En todo caso, seguro que ni con el Estatuto de Bayona le hubieran
dejado vivir sin trabajar…
Gonzalo rodríguez-Jurado Saro
Querido Gonzalo, ¡Soberbio! como siempre.
ResponderEliminarGracias por dejarnos leerte.
Javier Aguirre
"El que camina contigo"
Gracias ti por leerme, Javier. Gran paciencia...
ResponderEliminarQuerido Gonzalo,
ResponderEliminarConfirmo lo que dice Javier. Ya se echaban de menos estas piezas tan estupendas.
Un abrazo,
Luis
Pues te digo lo mismo, Luis: Gracias
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